Con distintos grados, unidades y zonas de empleo, es como los soldados del Ejército se entrenan diariamente para estar en condiciones óptimas para cumplir con su labor de servicio. Pero no son los únicos, también existen camaradas de cuatro patas que resultan fundamental en las diversas labores que realiza la Institución y que hoy celebramos en el Día del Perro.
Drako, Athenea, Sirus y Thor son los nombres de algunos caninos que forman parte del Centro de Entrenamiento Canino (CEC) del Ejército y que desempeñan tareas que aportan a la operatividad de las unidades. “Desde muy cachorros se les hace controles de salud, para que crezcan sanos y fuertes. Además, se les dan estímulos para paulatinamente detectar cuáles son las habilidades del ejemplar”. Así es como el Comandante del Centro de Entrenamiento Canino, Mayor Sebastián Aranki, explica la rigurosidad en que se entrenan estos ejemplares y cómo es que estos funcionarios de cuatro patas cumplen tareas al igual que un militar.
Una característica de los perros es que son fieles, es por lo mismo que el binomio -la suma del ejemplar canino y el guía-, siempre están unidos y se complementan. “La conexión no se logra de un día para otro, se debe dedicar tiempo. En mi caso con Athenea, que la tengo desde los dos meses de vida, hice un periodo de adaptación el cual tiene como resultado en que ella hoy sea cariñosa con la gente y muy dócil”, expresó el Sargento 2° Marco Antonio López, guía canino quien además menciona que esta perrita es mamá de varios otros canes de la Institución como Aquiles y Amalla donde el apego entre ellos se mantiene.
Una conexión que no solo logran con sus guías, sino que también con la ciudadanía. Así es como Taapaca un perro de raza San Bernardo quien es parte de la Brigada Motorizada N°24 “Huamachuco” y que tiene su nombre debido al volcán que existe en la zona, demuestra una de las virtudes militares como la Lealtad hacía el contingente como también al personal civil. “Para nosotros es una parte fundamental de la unidad, ya que nos acompaña en las instrucciones y también en los desfiles, donde la gente se acerca a él para sacarse fotos o solo conocerlo. Eso es lo que nos gusta de Taapaca, que nos levanta la moral como unidad tal como lo hace con la gente”, cerró el Cabo 1° Juan Melin, Instructor del Infantería y la persona a cargo del ejemplar.
Entrenamiento y Áreas de Misión
Para poder llevar a cabo un buen empleo de estos integrantes perrunos se requiere un entrenamiento arduo, el que es llevado a cabo bajo ciertas condiciones. “Cada entrenamiento que realizan los canes, si bien es exigente, todo está supervisado con veterinarios los cuales adaptan los ejercicios para evitar cualquier tipo de accidente”, añadió el comandante del CEC.
En este sentido, existen tres áreas donde el ejemplar se puede desarrollar: búsqueda y detección de explosivos; detección de drogas e intervención. En las dos primeras el olfato es fundamental, por lo que los guías de los ejemplares acostumbran el olfato con seudonarcóticos, libres del componente adictivo. En el tercero, son preparados físicamente para poder actuar en situaciones de estrés como lo son ataques y defensa del mismo personal.
Algo no menos importante son las medidas de seguridad y protección para estos canes los cuales constan de un casco integral, antiparras, protectores auditivos y botas de gomas, elementos que evitan ciertos tipos de accidentes en el entrenamiento como también en su empleo mismo.
A 18 años desde que se decretó el Día del Perro, la Institución destaca la labor de cada uno de los integrantes perrunos que cumplen tareas entregando cariño, respeto y compromiso en sus distintas labores de apoyo a los objetivos institucionales, para luego, después de ocho años de servicio, disfrutar de su retiro como un miembro más de la familia de su guía.
Por Andrés Armijo, periodista de la Dirección de Comunicaciones Estratégicas