Es el primer militar en su familia y descubrió esta pasión en el servicio militar, fue ahí cuando conoció a “su primer amor”, el Ejército de Chile. Ingresó a la Escuela de Suboficiales y desde entonces su empeño ha estado enfocado en el apoyo a sus camaradas en el ámbito de la Educación Física. Su interés lo ha llevado incluso a cursar cinco diplomados, un magíster y postular a un doctorado, todos vinculados a la preparación física y la docencia.

Hoy, el Sargento 2° Sebastián Sánchez G. ya cumple 17 años en las filas de la Institución, habiendo formado parte del exRegimiento de Ingenieros N°2 “Puente Alto”, Regimiento de Infantería N°1 “Buin” y, actualmente, en la Escuela de Suboficiales. En cada una de ellas ha aportado a la preparación física de sus camaradas y alumnos, logrando que cada uno alcance sus objetivos.

“Luego de entrar al Ejército pude darme cuenta de que la condición física es un punto muy importante, por ende, quise estudiar y ver más allá de cómo podía ayudar a la gente para que logren sus objetivos. Lo mejor que pude hacer fue estudiar mi segundo amor, la Educación Física, a la que gracias a Dios pude ingresar, estudiar en las noches y con eso poder apoyar a mucha gente a mejorar su condición física”, explica el Sargento Sánchez.

En la Escuela de Suboficiales, Escuela Matriz del Ejército, el militar sigue su pasión, apoyando a la formación de cientos de alumnos cada año, en su puesto como asesor deportivo y Plana Mayor de la Sección Educación Física.

“Yo me enriquezco y me siento muy bien de poder entregar mis conocimientos a mi gente, al personal del Ejército. También me siento feliz de que muchos alumnos tienen la idea de que cuando salgan al a planta puedan estudiar, perfeccionarse y aportar más al Ejército. Ellos creían que no se podía, y les expliqué que, si uno quiere y tiene la convicción de sacar otra carrera o cualquier objetivo, lo pueden lograr, siempre con disciplina”, dice el suboficial”.

Su próximo desafío, dice, está claro, obtener el doctorado en la Universidad de Murcia, España, y poder seguir aportando con las herramientas adquiridas en el ámbito deportivo del Ejército. Preparación continua e imparable, que lo llevaron a convertirse en un militar “fuera de serie”.

Por Nicolás Borcoski, periodista de la DIRECOME.